Los algoritmos criptográficos están encerrados en el chip generador de contraseñas. Funciona para cualquier dispositivo común que tenga micrófonos ya instalados, sean estos integrados o no. Por su función sin contacto (contactless) y por su encriptación única, es de fácil uso y no requiere de la introducción de tediosas y fastidiosas contraseñas.

Es esencial que este proceso sea lo más fácil y ampliamente disponible posible, y eso requiere un producto asequible. En la versión puramente informática (móvil), el coste de producción se limita a la gestión secreta de la logística. En la versión física, el coste depende del tamaño del objeto utilizado. El coste de este objeto puede reducirse a tan sólo un euro. Capaz de soportar miles de millones de usuarios, gracias a las tecnologías utilizadas y a la arquitectura de hardware distribuida.

Nuestra tecnología permite utilizar un solo dispositivo como llave de acceso a múltiples plataformas, dispositivos y ecosistemas donde la solución esté presente y habilitada.

Esto resuelve el dolor de cabeza del usuario de tener que crear contraseñas seguras y diferentes para cada una de sus plataformas, reemplazándola por una solución única y con estándares de seguridad del más alto nivel.